Imagen

La imagen visual de una marca es el factor clave para el éxito de cualquier empresa o negocio, es la forma en que van a reconocer la marca, producto o servicio, por eso es indispensable contar con un logotipo.

Los logotipos están en todas partes; están integrados en nuestro estilo de vida. Los logos influyen en nuestras decisiones, comunican y representan los valores de las empresas. Las tendencias vienen y van, las herramientas y técnicas de diseño evolucionan, pero aquella marca específica con un logotipo único nunca va a desaparecer de la memoria colectiva.

A través de la imagen corporativa, conseguimos que nuestro público objetivo se sienta identificado con los valores y cultura de nuestra compañía. Además, con esto logramos posicionar nuestra marca, puesto que está al tanto de cuáles son las necesidades y expectativas de su público objetivo.

Otra de las cuestiones por las que es importante la imagen corporativa es porque dota de coherencia visual a la marca, es decir, hay una homogeneidad y una relación entre todos y cada uno de sus elementos, a nivel gráfico como de comportamiento y comunicación. Por tanto, los productos y servicios de la compañía son fácilmente identificables.

La imagen corporativa, además, incrementa el valor de los productos o servicios ofrecidos por la marca. Una empresa preocupada por su imagen es una empresa detallista, que cuida los detalles y, por tanto, una empresa confiable y que se preocupa por el usuario.

A medida que una marca crece, su logotipo se va haciendo más familiar para un gran número de personas, creando la percepción que es una marca de confianza y aumentando el llamado Customer Lifetime Value (LTV), es decir, haciendo que se busque frecuentemente a la empresa. En estos casos, la primera cosa en la que se piensa es en el logotipo.